Tú, una vez más

Por hoy, basta de hablar de mi.
Empezaré contigo...un comienzo sin final, si, así es como lo voy a llamar.
Puede que romper mis esquemas desde el principio suene fácil de hacer y puede que a querer hoy justo lo contrario que hace un mes se le llame inestabilidad.
Parece la historia que cada día cuentan un puñado de personas. "Es verdad que ya antes me había ilusionado de esta forma, pero esta vez...esta vez es diferente" y así sucesivamente. Una frase que repetimos a lo largo de nuestra existencia tantas veces como sea necesaria.
No me puedo aventurar a hablar con palabras mayores. No puedo decir que seas tú.
Pero sé que mi destino te ha colocado de una forma estragicamente maravillosa aquí, ahora.
Solo quiero disfrutar este momento. Intentar no pensar que puede que algún día, cuando descubra que no vienes con fecha de caducidad, pueda unir dos vidas simplemente, contando momentos.
Que positivo suena todo, ¿verdad?. Obviamente vivo con la certeza de que existen posibilidades de que nos perdamos por el camino, de que seamos torpes andando juntos.
No es algo que quiera pensar. Para mi, ahora, soltarme de tu mano no es una opción.
Me suena a record...En un mes te he dedicado más palabras que a mi misma durante un año. Algunas están escondidas en una caja donde almaceno los sentimientos que alcanzo a explicar. Y otras se me escapan de los dedos y quedan plasmadas en papeles que recibes o en pantallas de ordenador.
Me siento impaciente por darle forma a este je ne sais quoi que me tiene impregnada de ti hasta las entrañas.
Suerte. Para ambos. Suerte :)

"Cuando termine los examenes..."

La frase del mes: "Cuando termine los examenes..."
Va seguida de infinitud de planes que ahora haríamos con los ojos cerrados, pero que en su momento no solemos hacer.
Es impresionante como 4 examenes cambian el ánimo, la actitud...todo.
Yo me he vuelto un especimen debora-alimentos. No se me ha ido aún el sabor a nocilla de la boca cuando ya estoy partiendo jamón... Me da igual que sea una magdalena rellena de chocolate o un bocadillo de paté...solo tiene que cumplir el requisito de ser contundente y calmar mi ansiedad. Hace semanas que no tengo si quiera un atisbo de hambre...Hambre...¿qué era el hambre?.
Mi estómago dejó de solicitar alimento, ahora es mi cabeza quien tiene el control...

Época de examenes...tenemos la bombilla encendida todo el tiempo...se nos ocurren las que podrían ser las mejores super producciones de hollywood, los mejores planes al aire libre, increibles escapadas de ocio, relatos magnificos...y unas ganas de salir...pasmosas...
Da igual que no frecuentaras cierto pub de tu ciudad...en época de examenes desearias estar en cualquier otro sitio menos en tu cuarto hincando los codos.

Y uno se vuelve inestable... ratos de hiperactividad sin explicación alguna, momentos de apatía total...noches nostalgicas pensando "me paso todo el día solo...", y ratos en los que solo te apetece reirte, y ahí, sentado en tu silla, como si un demente se tratara, te ries solo, en voz alta además, de todas las tonterias que se te ocurren.

En fin...para que os voy a engañar...escribir aquí en este momento es otra situación de esas en las que uno piensa: "cuando termine me pongo a estudiar fijo".
Así que creo que va siendo el momento de sacar valor y empezar a trabajar en mi penúltimo examen.

Suerte.